El mantenimiento preventivo en sistemas hidráulicos es una técnica que se utiliza para evitar fallos y averías en los equipos y maquinarias que funcionan mediante este tipo de sistemas.
Consiste en llevar a cabo una serie de tareas de revisión, limpieza y sustitución de componentes de forma periódica, con el objetivo de mantener el adecuado funcionamiento de los sistemas hidráulicos y prevenir posibles problemas futuros.
El mantenimiento preventivo se divide en dos categorías:
Mantenimiento planificado: La programación proactiva del mantenimiento de las máquinas donde, por ejemplo, cada mes se completa la lista de comprobación de una máquina y se presenta un informe.
Mantenimiento basado en el estado: Es el que se lleva a cabo no en función del tiempo, sino de determinadas condiciones o indicadores del funcionamiento del equipo.
Beneficios del mantenimiento preventivo en sistemas hidráulicos
El mantenimiento preventivo en sistemas hidráulicos ofrece una serie de beneficios tanto para las empresas como para los usuarios de las maquinarias. Algunos de los principales beneficios son:
1. Mayor vida útil de los equipos
Al realizar tareas de revisión y limpieza de forma periódica, se evita el desgaste prematuro de las piezas, lo que permite alargar la vida útil de los equipos y maquinarias.
2. Reducción de costes
Al prevenir averías y fallos, se reducen los costes asociados a reparaciones y sustitución de componentes. El mantenimiento preventivo resulta más económico que la reparación de averías graves o la compra de nuevos equipos.
3. Mejora en la productividad
Los tiempos de inactividad de la maquinaria se reducen significativamente al evitar averías y fallos. Esto contribuye a incrementar la productividad de la empresa y optimizar los tiempos de trabajo.
4. Mayor seguridad
El mantenimiento preventivo permite detectar y solucionar posibles problemas de seguridad antes de que ocurran accidentes. Garantizar la seguridad de los operarios es fundamental en cualquier entorno de trabajo. 
3 prácticas para potenciar el plan de mantenimiento preventivo en sistemas hidráulicos
Los problemas más comunes más comunes a los que se enfrentan los sistemas hidráulicos en maquinarias pesadas son el sobrecalentamiento del sistema, la contaminación del sistema y la presencia de contaminantes en el entorno operativo.
A continuacion 3 prácticas que le ayudarán a potenciar la eficacia del plan de mantenimiento preventivo de sus maquinarias:
1. Evite el sobrecalentamiento del sistema hidráulico.
La temperatura es un factor crucial en el correcto funcionamiento de los sistemas hidráulicos. Si la temperatura del sistema es demasiado baja, comienza la condensación en el depósito, lo que puede provocar la cavitación de la bomba.
Por el contrario, si la temperatura es demasiado alta, se produce la oxidación que provoca depósitos de barniz y lodo.
Así que lo más recomendable es realizar revisiones periódicas del enfriador de aceite y fuera del depósito para evitar el sobrecalentamiento.
2. Mantenga limpio el sistema.
Evite la contaminación del sistema por agentes externos a los que normalmente se encuentran expuestos las maquinarias como agua, arena, lodo mineral o residuos metálicos.
Este tipo de contaminación puede paralizar su equipo, provocar fallos en cascada a medida que una pieza tras otra sufren un desgaste prematuro y excesivo, y provocar un fallo catastrófico del propio sistema.
Para lograrlo es importante contar con equipos de protección altamente calificados como nuestras fundas de protección para cilindros hidráulicos, que están diseñadas para proteger sus maquinarias incluso en los ambientes más exigentes.
3. Mantenga limpio el fluido.
Finalmente, compruebe periódicamente la presencia de contaminantes en el aceite. Almacene el fluido hidráulico en los contenedores designados en un ambiente limpio, limpie el tapón de llenado antes de añadir fluido hidráulico.