Los cilindros hidráulicos estándar cuentan con características técnicas específicas que permiten su operación de manera segura y correcta, garantizando su máxima vida útil en las condiciones adecuadas.
De manera general, estos cilindros estándar están diseñados para una presión de utilización máxima de 200 bar, una presión de prueba máxima de 300 bar, velocidad de utilización máxima de 0.5 m/s, temperatura de utilización de -30°C a +90°C y para funcionar con aceite hidráulico mineral.
En relación a los materiales utilizados en su fabricación, principalmente se diseñan de la siguiente manera:
La camisa se fabrica de acero ST-52-3, DIN 2393, con tolerancia sobre el diámetro interior ISO H9 y rugosidad Ra <0,8 micras.
El vástago es de acero F-1140 cromado, recubrimiento mínimo de la capa de cromo 20 micras, rugosidad Ra < 0,2 y dureza mínima del recubrimiento de 900 HV, lo que garantiza una resistencia a la corrosión mínima de 200 horas según ISO 9227 rating 9.
La cabeza es de acero F-1140 nitrurado.
El pistón se fabrica principalmente de acero F-1140.
¿Qué recomendaciones tomar en cuenta?
Para que un cilindro hidráulico estándar pueda funcionar de manera óptima, es importante:
Proteger el circuito del cilindro utilizando un limitador de presión a 200 bar.
Verificar constantemente el estado de pureza del aceite, evitando que esté contaminado. Es importante colocar un cilindro en el circuito del cilindro.
Purgar el sistema antes de la puesta en marcha si es necesario.
Evitar soldar sobre la camisa. Si necesita soldar sobre el vástago o sobre el fondo, se debe desmontar el cilindro.
Si se va a almacenar un cilindro hidráulico, se debe evitar la intemperie, asegurándose que el vástago quede completamente introducido en la camisa y verificar si es necesario mantener engrasado.
Hacer mantenimiento preventivo a los cilindros hidráulicos para garantizar un buen funcionamiento y prolongar su vida útil.
En Fuelles recomendamos el uso de fuelles protectores para salvaguardar de manera externa los cilindros hidráulicos. Estos evitan la entrada de agentes contaminantes, humedad, ácidos, salinidad, exposición a temperaturas muy elevadas y otros elementos que disminuyen su eficiencia. ¡Una opción ideal para sus cilindros! 